
Cómo crear experiencias inmersivas para tu tienda
Las marcas no la tienen fácil; los consumidores somos cada vez más selectivos. No todos los anuncios nos hacen reaccionar. No todos los mensajes nos parecen creíbles ni nos representan. Y no, no hemos dejado de sentir, pero lo hacemos diferente.
Piensa en tu bar favorito, ¿por qué te gusta? Quizá el menú es similar al de otros, pero tiene algo más, llamado “ambiente”. Lo mismo pasa con las tiendas tradicionales y pop-up stores. Además de los productos, hay factores que las hacen más o menos atractivas de acuerdo a las experiencias que ofrecen. Así que mientras más inmersivas, mejor.
¿Por dónde comenzar?
Las experiencias inmersivas en tiendas involucran los sentidos del espectador, invitándolo a interactuar y después, puede llevar a una venta.
Para diseñarlas hay que tomar en cuenta:
- Quién es tu consumidor y qué lo mueve
- Cuáles son los objetivos de tu marca
- Cuál es la historia de tu marca y cómo la vas a contar
- Qué elementos son los más adecuados según presupuesto y espacio
Por ejemplo, la marca Timberland montó salas en sus tiendas de Nueva York simulando lluvia y nieve, ambientes para las que fueron hechas sus botas. Así, los visitantes pueden probarse el calzado en una atmósfera personalizada, comprar y tomarse la bonita selfie.

En ambos, la tecnología fue un aliado importante a través de luces LED y pantallas touchscreen, pero incluso se puede llegar más lejos. ¿Qué tal unos muros interactivos, videomapping o hasta pirámides holográficas?
Hoy en día no hay límites para crear experiencias inmersivas en tiendas, y mientras más versátiles, mejores serán sus resultados. Así que si tienes una idea en mente, déjanos conocerla, nosotros podemos ayudarte a implementarla.